LA FISCALIDAD FRANCESA EN LA GRAN DISTRIBUCIÓN

 Alexandre Bompard, director general de Carrefour, califica las medidas fiscales como un “RETROCESO “ para la economía francesa

La fiscalidad francesa está en el centro de las preocupaciones del sector de la gran distribución. Alexandre Bompard, director general de Carrefour y presidente de la Federación de Comercio y Distribución (FCD), expresó su preocupación durante una entrevista en France Inter, denunciando el anclaje de numerosos impuestos llamados "temporales" que se han convertido en permanentes. Para él, las medidas anunciadas en el proyecto de presupuesto de 2025 constituyen un cambio de rumbo inaceptable, tanto para las empresas como para los consumidores. Impuestos temporales que continúan Bompard advirtió que varios impuestos, inicialmente presentados como temporales, se han prolongado en el panorama fiscal. Declaró: "Conozco mis clásicos de la tributación, la lista de los llamados impuestos temporales que se han vuelto definitivos..." Citando la contribución para el pago de la deuda social (CRDS), introducida por dos años en 1996, dijo : “Todavía existe hoy, y ese es el caso de muchos impuestos. » También predijo que en 2027 otros políticos volverán a abordar estas cuestiones fiscales discutiendo la necesidad de ampliar estos impuestos para intentar restaurar las finanzas públicas. Un “cabeza a cola” de política económica Alexandre Bompard describió las medidas fiscales del proyecto de ley de finanzas de 2025 como un “cara a cara política”. "Hemos recuperado la competitividad media, la inversión y el empleo", afirmó, subrayando que los esfuerzos de mandatos anteriores para mejorar la competitividad de las empresas se estaban viendo arruinados por estas nuevas decisiones. La FCD también denunció lo que llama una “golpe fiscal organizada por el gobierno”, insistiendo en que “corresponde al Estado asumir el esfuerzo de restablecer las cuentas públicas en lugar de transferir la responsabilidad de su déficit a las empresas”. El impacto de la inflación en el consumo Los últimos años han estado marcados por una hiperinflación que ha afectado profundamente el comportamiento adquisitivo de los franceses. "El motor del consumo se ha parado", afirmó Bompard. “Los franceses sufrieron un loco shock de hiperinflación. » Observó que esta situación ha provocado una caída en las compras de productos de calidad, particularmente en los sectores orgánico, hortofrutícola y pesquero. “Hoy la inflación está cayendo, pero el shock sigue ahí y el motor del consumo no se ha vuelto a arrancar”, añadió. Por el contrario, países como España, Italia y Bélgica han visto una recuperación del consumo. "En otras geografías, incluidos países similares a nosotros, los volúmenes de consumo han comenzado a aumentar de nuevo, mientras que en Francia siguen siendo ligeramente negativos", explicó, destacando la preocupación de los consumidores franceses, que tienen una tasa de ahorro récord del 17%. El poder adquisitivo en cuestión Para reactivar el consumo, Bompard pide medidas concretas para aumentar el poder adquisitivo de los franceses. "Hay que dar poder adquisitivo a los franceses, buscar reducciones cuando los precios de las materias primas hayan bajado", afirmó, insistiendo en la necesidad de que los consumidores se beneficien de las reducciones de precios en la industria agroalimentaria. También pidió un “santuario” de materias primas agrícolas, destacando la importancia de una negociación previa entre agricultores e industriales. Criticando las propuestas del Gobierno, Bompard expresó dudas sobre la eficacia de un cheque alimentario financiado con el IVA. "Es una intención loable, pero no estoy seguro de que hoy debamos decirle a los franceses que estamos aumentando los impuestos", afirmó. Insistió en que aumentar los impuestos no es la solución y dijo: “No quiero volver a la tributación, cuál es mi misión: invertir en calidad de los alimentos. »

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