viernes, 28 de febrero de 2014

Porqué la mayoria de las tendencias no importan

Si usted cree que las declaraciones de tendencias típicas de 2014 - esto va a ser el año de los grandes datos, dispositivos portátiles y tabletas . Estos son los hechos que hemos escuchado en los últimos dos meses se presentan como grandes perspectivas para el próximo año. Hay sólo unos pocos problemas con estas supuestas tendencias, y otros como ellos:

    Problema 1: NO OBJETIVIDAD – Si usted vende martillos, declarando 2014 el "año de los martillos" no es una porción sólo propia, es probable que sea simplemente erróneo. Grandes tendencias deberían tener una mirada imparcial en todas las industrias para describir una idea que realmente importa.
    Problema 2: NO CREATIVIDAD –  Tendencias necesitan hacer más repetición más que el conocimiento Por ejemplo, decir que "más gente va a comprar tabletas en 2014" Es obvio-e inútil. En cambio, las grandes tendencias deben describir el mundo de una manera fresca que no has escuchado antes.
    Problema 3:  NO PRUEBA – Compartir una tendencia con Salida ejemplos específicos es como declarar usted mismo un músico con la simple compra de una guitarra. Grandes tendencias sólo son importantes cuando hay ejemplos de la vida real y las historias que ilustran cómo en la realidad está sucediendo en el mundo.
    Problema 4: NO APLICACIÓN –  Incluso cuando la tendencia parece tener sentido, el lugar que muchos artículos de tendencias  es en la tendencia "avistamiento". Por el contrario, las grandes tendencias deben estar vinculados con el asesoramiento real sobre cómo les afectará a su negocio.

Hay un autor que  los últimos cuatro años, ha escrito libros con una  recopilación de información un informe anual tendencia que apunta a resolver cada uno de estos problemas mediante la adopción de una mirada creativa y probada imparcial a las tendencias que se importan cada año ... y vincularlos con algunos consejos y guías de actuación reales de cómo se aproveche de ellas. Por primera vez tres ediciones de este informe se han consultado y compartido en línea más de medio millón de veces.


sábado, 22 de febrero de 2014

libros de marketing más influyentes

Vamos a analizar tres libros de marketing del año pasado:
The Click Momento – Frans Johansson

¿Qué tan importante es la suerte de su éxito? Esto no es una cuestión más de nosotros a menudo les gusta pensar - porque la suerte parece que la cosa más incontrolable y aleatoria cada vez. Pero ¿qué pasa si usted podría tomar pasos específicos para mejorar su suerte, y hacer el trabajo de la aleatoriedad en su favor? Esta es la premisa intrigante que Johansson comienza este libro con. No me duele que él es uno de los autores más talentosos que leerá, cuyo primer libro (El Efecto Medici) fue uno de mis libros favoritos. En su segundo trabajo literario, su gran pensamiento y fácil de digerir las lecciones no te decepcionará. Este es uno de los pocos libros que he preordenado el segundo que estaba disponible en Amazon - y uno de los primeros agregué a la lista para estos premios tan pronto como leí el primer capítulo.
Trust Me, I’m Lying – Ryan Holiday
La idea simple y poderosa que hace fácilmente este libro vale la pena el dinero que gaste en ella es cómo magistral los disecciona el  autor y explica cómo las ideas y la publicidad son de una manera  viral hoy. Es posible que se estremecen con algunas de las técnicas que utiliza para manipular los blogs y las instituciones de los medios "imparciales" ... pero en última instancia, este libro es el equivalente a sentarse y pasar unas horas en una conversación con uno de los estrategas de relaciones públicas más innovadores de nuestro tiempo. Simplemente aprender una cuarta parte de las habilidades que emplea a diario puede ayudar inestimable en la generación de una mayor atención para su negocio o idea.
 Wait – Frank Partnoy
Ok, tengo que admitir que tengo un sesgo hacia el gusto de este libro, ya que coincide con lo que yo he utilizado durante mucho tiempo como una filosofía personal de la vida. En un mundo en "tiempo real" a menudo se utiliza indistintamente como una palabra de moda para describir una necesidad para las reacciones más rápidas y más rápidas "gut"(Respuestas humanas al miedo), el mensaje central de este libro es no sólo oportuna - pero también un tanto contradictorio. Espere ofertas muy necesarios la investigación y la prueba de que a veces la única manera de tomar mejores decisiones es retrasar en realidad el proceso de toma de decisiones por tomar más tiempo para considerar las alternativas. A veces esto puede ser el retraso deliberado en milisegundos - como cuando un jugador de tenis a lo hora de dar  un servicio antes de elegir su ángulo de la raqueta para volver. Otras veces, el retraso puede ser mucho más largo. Independientemente de los plazos, en una era cortejada por el encanto de tiempo real todo ... Espera demuestra que a veces la ciencia y el arte de la demora puede llegar a ser el secreto último de mejorar su toma de decisiones.





viernes, 14 de febrero de 2014

MODELO DE NEGOCIO

«Nuestro éxito son las recomendaciones de compra de alguien en quien confías»
 El austriaco Gerry Seebacher es uno de los profesionales encargados del desarrollo de negocio de Lyoness, una comunidad de compras internacional y multisectorial fundada en 2003 y con presencia en 42 países, que ha puesto su punto de mira en el mercado español. Ubicado en el nivel 8 de la organización, el más alto, es un experto en esta red global en la que se benefician tanto compradores como establecimientos comerciales: los afiliados reembolsan dinero, mientras que las firmas ganan clientes fieles y les conceden ventajas especiales.
Desarrollando la fórmula win-win, algo así como ‘él gana, tú ganas’ por cada compra que  realices y por cada cliente que sumes a la red, Lyoness ha conquistado 45 países y reunido en una cadena comercial mundial basada en la fidelización a más de 3,3 millones de clientes, 36.000 establecimientos comerciales y 4.000 tiendas online de todo tipo, según los datos aportados por la compañía. Gerry Seebacher, impulsor y referente mundial de este novedoso modelo de comercio.
¿Qué puede aportar el comercio multinivel al comprador y al comerciante español?
Básicamente, al consumidor le ofrecemos que, en vez de llevar un montón de tarjetas de fidelidad, de puntos o de estrellas, lleve una sola y ésta le devolverá dinero en su cuenta bancaria cada vez que realice una compra. También contemplamos dar servicio a los emprendedores, a los que decidan impulsar su propio negocio a través de Lyoness y crear una red que les permitirá interrelacionarse con sus clientes de una manera muy sencilla. La tercera modalidad para involucrarte con nosotros es si tienes un comercio, puedes utilizar nuestro programa de fidelización internacional donde todo está conectado a nivel mundial, en los 45 países donde actualmente operamos.
¿Ven el mercado español maduro para aceptar las ventas multinivel?
Los españoles tienen una mentalidad muy abierta y mucho afán por trabajar. No somos una compañía multinivel a la antigua usanza, porque nosotros no realizamos una venta directa de un producto sino que estamos más vinculados al marketing de recomendación. Nuestro objetivo es conectar los comercios con los clientes, actuamos como una agencia.
¿Qué beneficios genera esta relación para ambas partes?
Todos los comercios buscan clientes fieles y, si un cliente recibe un dinero de vuelta cada vez que compra, le  gustará ir a ese establecimiento para comprar. Estos clientes que reciben dinero  están satisfechos y recomiendan esta forma de comprar a sus familiares, amigos, conocidos... Esta comunicación entre personas incrementa la base de clientes que van a comprar en los comercios asociados. Esto es un concepto que lleva funcionando más de once años.
¿Les preocupa la caída de consumo interno que sufre España por la crisis?
Tenemos la experiencia de lo que nos ha ocurrido en Grecia. En los últimos años, en este país han cerrado más del 50% de sus pymes, mientras que nuestro crecimiento ha sido superior al 120%. Así que nuestra idea tiene que ser buena.
Al pequeño comercio tradicional. ¿Qué le puede aportar su idea de negocio?
Aquí tenemos un equipo de profesionales muy bien formados para poder explicarles nuestras ventajas a los comercios. Cada región donde operamos cuenta con unos agentes pyme muy bien formados que pueden explicar las ventajas del programa de fidelización.
 ¿Qué productos, servicios y empresas abarca su red?
Todos excepto los night-club y las apuestas. A mí me encanta comprar en El Corte Inglés -grupo incluido en Lyoness- y que me devuelvan dinero, o dormir en hoteles incluidos en la red y que me devuelvan dinero...
¿Cuál es la herramienta más utilizada en su red de relaciones comerciales? ¿El smartphone, el ordenador o la compra directa?
Difiere dependiendo la edad de los consumidores y su nivel cultural. Estamos orgullosos porque hemos logrado un mix de tecnologías y procedimientos que puede ser utilizados -como la tarjeta- por personas de 90 años de edad o por jóvenes de 16. Nos sorprende que los jóvenes estén orgullosos de pertenecer a esta red y de que también estén sus abuelos. Hay una mezcla entre tecnología y trato directo que está funcionando.  
¿Considera que en España puede triunfar este comercio?
Como cualquier gran empresa, como cualquier gran oportunidad, todo empieza con una visión, con una idea innovadora... Ha habido muchas a lo largo de la historia y, de entrada, no se ha creído en ellas. Recuerdo los primeros pasos de Steve Jobs o del fundador de Red Bull y vecino mío   [Dietrich Mateschitz]... Nuestro crecimiento es muy sano porque está basado en la confianza y en la recomendación. No hay nada más sano que la recomendación de alguien en el que confías. Aunque no crecen todo lo rápido que quisiéran, sí crecen sano.

viernes, 7 de febrero de 2014

EL COMERCIO HOY

Me contaba una amigo,! sabes que los chinos compran Ferraris originales!
En el comercio hay muchos patrones vamos a explicar esto.

 China se ha convertido en la alternativa de la competitividad basada en los bajos costes de fabricación y de salarios. Sin embargo, los chinos, cuando pueden pagárselo, compran el Ferrari original, las marcas de ropa  o los  mejores vinos de la Rioja, porque valoran y admiran estos productos occidentales.
Eso es que no hemos perdido la competitividad que creemos.
No hay un indicador específico que determine la competitividad de una empresa. Hay estadísticas para todo menos para la  competitividad, porque es un concepto que nace en un contexto país y basado en el desarrollo económico y social del mismo. Ahora hay un discurso basado en que somos más competitivos si bajamos los costes salariales y es erróneo porque el mayor coste para las empresas es la financiación y no los salarios. Si solo mirásemos el coste laboral puro, perderíamos el talento y los buenos profesionales, dejaríamos de hacer mejor las cosas y perderíamos capacidad para ser más competitivos. Con este discurso nos ponemos el palo en la rueda.
Si la rebaja de salarios no nos da competitividad, ¿hacia dónde tenemos que mirar?
Los empresarios se deben hacer estas preguntas: ¿Quién quiere ser el más barato?, ¿quién quiere ser diferente? y ¿quién el mejor? Las tres no son incompatibles, pero conjugarlas es complicado. Creo que tenemos que ser más productivos porque es algo que podemos medir y que es el resultado de lo que yo obtengo utilizando unos recursos (la mano de obra es solo uno de ellos) y la capacidad de diferenciarme, de ser distinto. Tenemos que huir de la manada de pingüinos y establecer nuestra ventaja competitiva sobre lo que quiere el cliente, sobre cómo hago las cosas y con qué recursos y sobre quiénes son mis compañeros de viaje. Necesitamos más colaboración, muchas más alianzas.
¿Está viendo muchos pingüinos fuera de la manada?
No los veo en la medida que a mí personalmente me gustaría verlos. Desde la empresa cometemos muchas veces el error de creer que el trabajo lo tiene que hacer el comprador. Y a este le afectan dos indicadores: el nivel de empleo y, por relación, el nivel salarial. Es obvio que hay conservadurismo en el consumo porque el poder adquisitivo no es suficiente para incentivarlo. Ante esto, muchas empresas han optado por el ‘cuerpo a tierra’ para ver si pasa la racha, lo que les ha privado de tener una perspectiva sobre cómo ha ido evolucionando y cambiando la sociedad. Y recuerdo que el consumo interno supone las dos terceras partes del PIBy que no le sustituirán las exportaciones por mucho que crezcan.
 ¿Y las que levantan la cara? ¿Cómo se están comportando?
Se han preguntado por el momento que están viviendo, qué tengo que hacer con el negocio, cómo adaptarlo a la realidad y quiénes son los clientes. Las empresas necesitan un plan, no basado en las cifras de ventas, sino en cómo reaccionar cuando aquello que no está previsto se da. Hay que tomarse tiempo y ver a largo plazo, no en el día 30 de este mes.
 ¿Recuerde algunos ejemplos de éxito que ha conocido?
Mercadona ha reconocido que ha dejado de ser competitivo en el tratamiento del producto fresco. Lo han hecho tan mal como para dar oportunidades para que el pequeño comercio se implante en el entorno de sus supermercados y se adapten a esta circunstancia aportando valor al servicio al cliente, preparándote el pescado, dándote recetas para la carne..
 Es un buen ejemplo de supervivencia en un mundo de gigantes. Los pequeños comerciantes tienen que asumir que están en una cuerda de presos: cuando uno corre mucho se cae y para la actividad de todo el colectivo. Deben empezar a sentir el fenómeno de la colaboración.
¿En qué ámbitos?
Tienen que buscar la manera de sacar ventajas en niveles de aprovisionamiento -ya lo han hecho con entidades financieras con los sistemas de pago- y en elementos comunes como la limpieza o la asistencia para la adecuación de sus establecimientos. Hay procesos que se pueden hacer de manera conjunta sin necesidad de que se comercialice un mismo producto. Es el resto de la cooperación, aún pendiente. Nos queda una generación para superar estereotipos del pasado. Hay buenos profesionales y oportunidades.